Entre fines de la década del ‘60 y principios del ‘70, dos figuras comenzaron a descollar en el universo radiofónico deportivo. Uno fue José María Muñoz, en Radio Rivadavia; el otro, Alfredo Ramón Curcu, en Radio Mitre. Entre los dos acapararon la atención del público que seguía las transmisiones a través de los aparatos de radio desde sus casas, o bien, en las propias tribunas.
Los memoriosos recuerdan que “Curcu”-como se lo conoció popularmente- fue uno de los primeros que siguió la campaña de Boca Juniors en forma exclusiva. Pero, algunos años antes (década del ’50), Curcu había incursionado por Radio Antártida con un programa llamada “Desde la tribuna”. Allí comenzó a capitanear una producción que, los sábados, transmitía los encuentros del ascenso, en tanto que los domingos, hacía lo propio con los partidos de primera división.
De su voz clara y sonora todavía permanecen en el recuerdo de los hinchas dos relatos que quedaron en la historia viva del fútbol. El primero, el de aquella final de Independiente contra el Inter de Italia (1964) y, el segundo, el penal que Roma le atajó a Delem (1962).
